Tenemos
poca información sobre el xoloitzcuintle con pelo durante la mayor parte del
siglo XX, la existente gira en torno al sacrificio de cachorros recién nacidos
como práctica generalizada. Sin embargo hay una noticia que habla de su
salvaguarda y de lo que, de manera probable, fue el primer criadero de
xoloitzcuintles en México.
La
historia nos la cuenta, en sus memorias, Eduardo de Río García, mejor conocido
como Rius, uno de los moneros políticos más conocidos y
reconocidos de México. En ella se entrelazan varios personajes de la cultura nacional.
Emma
Hurtado llega a la vida de la pareja Rivera-Kahlo allá por el año de 1947 y se
dedica a promover la obra pictórica del muralista. A Frida no le es simpática
por la gran confianza que Diego le deposita, al grado que llega a referirse a
ella como la hurtadora[1]. Mote que quizá presagiaba lo que iba a ocurrir
después de la muerte de la pintora: la señora Emma, de ser una especie de asistente
personal, se convierte en la esposa del muralista en 1955.
Eduardo
del Río se casó - en el año 1966[2] - en
primeras nupcias, con Rosita Dobleú, quien era ahijada de Emma Hurtado[3],
gracias a esta cercanía familiar, el dibujante tuvo la oportunidad de poseer uno
de los xolo del pintor.
“en ese lejano entonces teníamos un perro
degenerado de ixcuintli que nos había obsequiado doña Emma Hurtado (la última
esposa de Diego Rivera), producto de la cruza que de vez en vez hacían en el
criadero de perritos xoloixcuintlis que había fundado Diego para perpetuar la
raza de aquellos preciosos perros aztecas. El Oso , pues, era un xolo con
pelos, muy listo y muy querendón…”[4]
De
lo anterior se desprende, en primer lugar, la existencia de un criadero
auspiciado por Diego Rivera y continuado por la señora Hurtado, así como la
preocupación o necesidad de encontrar hogar para los cachorros nacidos con pelo
que, como lo menciona Rius, eran considerados degenerados en su raza según las
ideas de la época.
Recordemos
que en 1960 sale a la luz la obra del coronel británico Norman Pelham Wright, El enigma del xoloitzcuintle, cuyo
contenido – ya superado en la actualidad - empiezan a permear en el ámbito
canófilo. En sus postulados sostiene que las camadas mixtas son resultado de
siglos de cruzas entre perros pelones y perros callejeros, que la presencia de
peludos son “saltos hacia atrás” en la calidad de la raza, y que una buena
crianza daría como resultado camadas sin ejemplares con pelo. Por lo tanto, según
el pensar del coronel Wright, cuando se haya purificado la raza ya no habrá
camadas mixtas[5],
afirmación equivocada y falta de sustento.
Desgraciadamente,
pese a los avances científicos en
materia genética que desmienten esas ideas, todavía hay gente que sigue
sosteniendo las aseveraciones equivocas del coronel y sus prácticas sacrificiales, desdeñando la
utilidad reproductiva de los ejemplares peludos y, claro está, también dejando
de lado lo listo y querendones que son estos xoloitzcuintles.
04 de Octubre de 2015, día de San
Francisco de Asís.
[1]
SÁNCHEZ SORONDO, Gabriel. Diego Rivera y Frida Kahlo. El amor entre el
elefante y la paloma. México, L.D.Books, 2015, p. 139
[2] RIUS.
Mis
confusiones. Memorias desmemoriadas. México, Grijalbo, 2014, p.189
[3] Ibíd
p. 52
[4] Ibíd.
pp. 289-290
[5] VALADEZ
AZÚA, Raúl y Gabriel Mestre Arrioja. Historia del xoloitzcuintle en México.
México, UNAM-IIA-MDOP-Cámara de Diputados, 1999, p. 38